viernes, 8 de febrero de 2013

NATURALEZA HUMANA?

LA NATURALEZA SUPUESTAMENTE HUMANA

"Nunca dudes de que un pequeño grupo de ciiudadanos,

reflexivos y comprometidos,

puede cambiar el mundo.

De hecho

es lo único que alguna vez lo ha hecho.".

Margaret Mead

PARTICIPANTES EN ESTE FILM

Dr. Robert Sapolsky, Dr. Gabor Maté, Richard G. Wilkinson, Dr. James Gilligan, Dr. John McMurtry, Michael Ruppert, Max Keiser, Dr. Berok Khoshnevis, Dr. Adrian Bowyer, Jacque Fresco, Roxanne Meadows, Dr. Colin J. Campbell, y Jeremy J. Gilbert.

Dr. Robert Sapolsky. Profesor de Ciencias Neurológicas, Universidad de Stanford.

"¡ese comportamiento es genético! frase que dice solamente de una visión determinista de la vida, la frase es un disparate. ... seguir con la frase "eso es genético" dice de "hay una contribución genética y no una determinación, seguir diciendo esta frase es eugenésico, historico generalizado y potencialmente peligroso" Si una madre sufre estrés en el embarazo, su hijo es más propenso a tener disposiciones y dificultades. La hambruna por ejemplo (la holandeza en 1944 provocada por los nazis), dispone a un feto a almacenar azucar y grasas, de adulto es más propenso a sufrir enfermedades relacionadas con este almacenamiento: hipertensión, obesidad, síndrome metabólico. La experiencia de los padres sobre la adversidad se transmite a sus hijos, depresión, etc. errores evolutivos provocados por los humanos. el humano se adapta a la calidad de las relaciones sociales. en la infancia se le muestra al niño cómo es el mundo en el que has nacido (cf. el niño primero, mmz).

Dr. Gabor Maté. Médico, Autor, Portland Society.

" la mayoría de las enfermedades complejas pueden tener una disposición genética, pero no una predeterminación genética: enfermedades de corazón, cancer, salud mental, enfermedades reumatoides, enfermedades auto-inmunes en general, adicciones. ninguna de ellas está determinada genéticamente. ..." decir lo contrario lleva a no trabajar en resolver estas dificultades humanas, con la justificación de que todo es asi, simplemente. existen muchas más adicciones que a las drogas. también al poder, por ejemplo, corporaciones que deben obtener, más y más, estamos destruyendo la tierra a causa de tal adicción, esta adicción es más peligrosa que la droga, sin embargo obtienen más respeto y recompensas. La adicción al tabajo mata a miles de personas al trabajo. Los proveedores de este vivio, niegan el efecto de su vicio en la muerte de tantos. si entiendes la adicción en un sentido más amplio, ninguna actividad es adictiva, lo que hace que florezca la adicción es la combinación entre susceptible a cualquier adicción más experiencias de la vida, experiencias que dan forma al cerebro. Y esas experiencias comienzan en el útero. En las madres abusadas durante el embarazo, tenían niveles más altos de cortisol, la hormona del estrés. Sus hijos son más propensos a manifestar enfermedades de adicci, esquizofrenia. LOS EFECTOS PRENATALES TIENEN UN IMPACTO ENORME EN EL SER HUMANO, EN DESARROLLO. Esto sucede por algo -en lo que el psicoanálisis ya ha insistido- la prematuración: en el caballo el desarrollo del cerebro se da in útero, en el ser humano se da por fuera del útero, y la razón de esto es evolutiva. la cabeza se agranda en el ser humano, así como su pelvis se estrecha para caminar, son caracteristicas, justamente humanas, Bingo, tenemos que desarrollarnos por fuera del útero. Y este desarrollo extrauterino está influenciado por el entorno. si a un niño que nace con el sistema óptico intacto se le pone en una habitación oscura durante cinco años, quedará ciego porque el desarrollo del aparato óptico requiere de la luz. Experiencias tempranas incluso de las que no hay recuerdo -pero que según el psicoanálisis hay huellas mnémicas articulables incluso (mmz)- hay dos tipos de memoria: explicita, el recuerdo, el hipocampo codifica el recuerdo, y memoria implícita, que es emocional; el impacto emocional y la interpretación que el niño hace de esas experiencias emoocionales están arraigados en el cerebro en forma de circuitos nerviosos, listos para dispararse si hay necesidad. las personas adoptadas tienen a menudo sentimiento de rechazo, no recuerdan, pero su memoria emocional está grabada en sus cerebros -esta información que es articulable en la palabra, es lo que se descubre, justamente en el psicoanálisis (mmz)-.

los bebés prematuros, si son tocados y acariciados durante 10 minutos en el día, se protege su desarrollo. Requerimos de ser abrazados. Winnicott dijo que fundamentalmente dos cosas pueden ir más en la infancia: cosas que deberían ocurrir pero no ocurren, y cosas que ocurren y no deberían ocurrir. en la primera categoría está el abuso, en la segunda la calidad suave de crianza, se da abandono, el padre está, pero no presente.

Dr. Richard Wilkinson. Profesor Emérito de Epidemiología Social, Universidad de Nottingham.

los genes no son cosas que nos hagan comportarnos de una forma particular sin tener en cuenta nuestro entorno, los genes nos dotan de diferentes formas de responder a nuestro entorno y parece que, de hecho, algunas de las primeras influencias en la infancia y el tipo de educación, afectan a la expresión genética, de hecho encendiendo y apagando los diferentes genes para así colocarte en una trayectoria evolutiva distinta que se adaptaría al tipo de mundo con el que tienes que lidiar... " en los suicidas encontraron cambios genéticos cerebrales a partir de abusos recibidos en la infancia, cambios cerebrales que no aparecen en el resto de personas no abusadas, "este es un efecto Epigenético, la activación o no de ciertos genes en función del entorno".

"El argumento de que la infelicidad y el comportamiento delictivo, de alguien que vive en un país de los más prósperos de la tierra, por ejemplo, es asunto genético, no es sino una forma de zafarse del problema de investigar los sistemas sociales, económicos y políticos que, de hecho, subyacen a muchos comportamientos antisociales."

DR. James Gilligan. Exdirector para el Estudio de la violencia. Escuela de Medicina de Harvard.

"En un estudio en Nueva Zelanada, encontraron que podían identificar una mutación genética, un gen anormal que tenía alguna relación con la predisposición a cometer actos de violencia, pero sólo si en su infancia, también el individuo había sido víctima de graves abusos. En otras palabras, un niño con este gen anormal no sería más propenso que otro para ser violento y tenían una taza más baja que el resto de la población en cometer violencia, siempre que no fueran abusados en la infancia. Los criminales, en su origen, son sólo sobrevivientes de actos de barvarie."

Zeitgeist: Moving Forward

glosario:

la violencia no es universal.
en algunos de los grupos originarios humanos, en realidad no había violencia.
grupos religiosos anabaptistas: amish, menonitas, huteritas.
quibuts:
El ser humano requiere de buen trato, de ser aceptado, visto, escuchado, abrazado, amado.
sin lo cual, simplemente, muere.

comentarios: psy-hospital.

En su asirse de su propia hechura.

dado que el deseo insiste en hacerse saber,

queda invitad@

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Margarita MOSQUERA ZAPATA

Psicoanalista
Tel: 2817046 // 3168255369
Itagüí, Antioquia, Colombia
http://analiz-arte.blogspot.com/
http://psy-hospital.blogspot.com/

http://psy-hospital.blogspot.com/

a la excisión, "no"

Una exposición en Belgica para decir a la excisión, "no"

fuente

En el 2013 es un acto de valentía aún, rechazar la excisión. La que ha sido excidida y no utiliza más su cuchillo contra ninguna niña, la madre que responde con un no a la excigencia de excisión ofrecida por la familia del marido, el médico que rechaza ser cómplice de tal práctica: todos toman un riesgo al decir no, a las mutilaciones.

vamos al encuentro de hombres y mujeres de Europa (Bélgica, Francia, Reino Unido) y de Africa (senegal, Djibouti, Guinea), para ver cómo, a su manera, ellos se resisten a la excisión. El resultado es una serie de 32 retratos (textos y fotos), que rinden homenaje a estos resistentes. Una gran exposición itinerante circulará en lugares públicos (estaciones, parlamentos, etc.) con el fin de sensibilizar a los políticos, profesionales de la salud y de la educación, así como a todos los ciudadanos de Europa o Africa sobre los modos de resistencia contra las mutilaciones. Por otra parte, una pequeña exposición acompañada de un folder con 10 retratos, circulará en los centros de planificación familiar, centros de salud y otros lugares frecuentados por las mujeres que han sido excisidas y las personas que tienen que ver con la práctica. Un libro se presentará igualmente "excisión, mi forma de decir no" es el fruto de la unión entre GAMS y la BoÎte à Images.

Es este el texto de presentación de la exposición en Bélgica, al norte de Bruselas, que se realiza entre el 6 y el 20 de enero de 2013 en favor de la protección a los niños, sobretodo de aquellos que son amenazados con la excisión, . la circunción, el crímen mas grande contra la humanidad.

Sobre este tema y todo lo que tenga que ver con proteger a los niños y niñas de la violencia y el maltrato infantil, tendremos la ocasión de leer en estas páginas en el marco de esta campaña independiente y a nombre propio, que realizamos a través de esta página http://psy-hospital.blogspot.com/, dedicada inicialmente al trabajo de un psicoanalista y psicologo clínico en un hospital, y transformada ahora, en este otro tema que es de interés general, mundial.

DOMINGO, 18 de marzo de 1979,

REPORTAJE:PRÁCTICAS RITUALES Y VIOLACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS/Y 2

La infibulación y la excisión anulan la capacidad sexual de la mujer

ESTHER FERRER 18 MAR 1979

La práctica de la excisión y la infibulación, dos de las formas más corrientes que se emplean para mutilar sexualmente a las mujeres, no sólo se emplea en pueblos con religión musulmana, sino también en grupos que practican la religión cristiana. Aunque las razones que se dan para justificar estas mutilaciones varían de un país a otro, en todos estas prácticas tienen las mismas consecuencias: reducen e incluso anulan la capacidad sexual de la mujer, e impiden que ésta se tome «libertades» antes del matrimonio. Esther Ferrer analiza en este segundo y último capítulo los orígenes y extensión de estas mutilaciones y describe las consecuencias que se derivan de estas prácticas primitivas, pero todavía vigentes.

Actualmente, la excisión y la infibulación se practican en 26 países, desde el cono de Africa y el mar Rojo hasta la costa atlántica y desde Egipto hasta Tanzania, comprendiendo también la mayor parte de Nigeria, los dos Yemen, Arabia Saudita, Irak, Jordania, Siria y el sur de Argelia. Con mucha menos frecuencia se realiza en algunas tribus de América Latina, Brasil, Perú y México, así como en Malasia y Pakistán. Como escribe el doctor Gérard Zwan (El sexo de la mujer), «el odio al clítoris es casi universal».

Durante mucho tiempo se pensó que estas prácticas eran patrimonio exclusivo de pueblos con religión musulmana y tenían su fundamento en el Corán. Desgraciadamente se realizan también entre poblaciones cristianas, coptas y animistas y sólo una interpretación tendenciosa y deformada de algunos pasajes del Corán permite encontrar en el mismo su justificación. Además, su origen es más antiguo, pues ya Herodoto y Estrabón las citaban y aunque no se ha podido confirmar el hecho de que algunas momias de mujeres egipcias presentaran huellas, de esta «iniciación», sí es cierto que se practicaba en el Alto Nilo en tiempos faraónicos, como lo demuestra un papiro fechado 163 años antes de Cristo.

Una Práctica muy extendida en África

Según una leyenda fue Sarata, verdadera esposa del profeta Ibraim, quien por celos realizó la primera excisión sobre la esclava Hediara (que tuvo relaciones con el profeta, para conseguir un hijo, puesto que Sarata, naturalmente, era estéril).

Dejando de lado su verdadero origen, difícil o imposible de conocer, por lo que respecta a las razones que se dan para justificarlas, varían de un país a otro, incluso de una etnia a otra, pero todas tienen un común el escondido deseo de reducir la capacidad sexual de la mujer. Entre los dogón la excisión es obligatoria, debido a que en su cosmogonía la niña tiene un elemento masculino, el clítoris, que debe extirparse, pues es contrario a su naturaleza y no le permite convertirse en una verdadera mujer (por los mismos motivos que para arrancar el elemento femenino practican la circuncisión sobre los niños, pero está claro que sus consecuencias no son comparables). «Una niña con clítoris es como un niño», dicen, y es evidente que esto no es posible, Hay que señalar la diferencia, sobre todo en un sistema social en donde esta «diferencia» supone también necesaria y automáticamente una inferioridad.

El fantasma de la mujer castradora está presente a la hora de justificarlas; «los bambara extirpan el clítoris con el pretexto de que su dardo puede herir al hombre, pudiendo incluso ocasionarle la muerte». Entre los tova del Gran Chaco se considera el clítoris como un diente que queda, una vez que todos los otros han desaparecido de la vagina de la mujer.

Por lo que respecta a la infibulación, aunque la razón aducida es la de proteger a la mujer contra la violación, está claro que la verdadera es la de impedir que la mujer pueda tomarse «libertades» antes del matrimonio y, sobre todo, eliminar toda posibilidad de que pueda producirse placer a sí misma por la masturbación.

El clítoris, un órgano vergonzoso

Es muy frecuente considerar el clítoris como un órgano de placer estéril, vergonzoso e incluso peligroso, pero no sólo entre los países en vías de desarrollo; en Europa, durante los siglos XIX y XX (el último caso de circuncisión femenina conocido se realizó en 1948), se practicaba la excisión y cauterización del clítoris, sobre niñas y mujeres, por orden de los sabios doctores, con el pretexto de masturbación, ninfomanía, histeria o locura, «para calmar los ardores de las mujeres siempre a merced de su fisiología».

El que generalmente sea la mujer quien lleva a cabo la intervención, si bien como dicen algunos «especialistas» puede efectivamente responder al deseo de identificación, de que la hija repita la experiencia de la madre, incluso cuando sea una experiencia desgraciada, significa fundamentalmente que la mujer acepta, se resigna al papel de transmisora de la ley del hombre. Es la ejecutora de esta ley, contra la cual sabe que no puede rebelarse, pues si someterse a ella significa sufrimiento transgredirla supondría para la hija la muerte social, la segregación, la pérdida de la única identidad posible, la de esclava. Difícilmente encontrará un marido (elemento imprescindible de integración en el grupo) y, en muchos casos, se le asimilará a la prostituta.

Además de los terribles y a veces definitivos traumas psicológicos que esto produce en las niñas, las consecuencias físicas son estremecedoras. Las mutilaciones suprimen en la mujer toda posibilidad de placer clitoridiano. Según el informe del doctor Shandall en la conferencia de Jartum, el 80% de las mujeres examinadas no habían, experimentado ningún placer sexual jamás y 80 de entre ellas no sabían ni que existía. Más sorprendente es el resultado de la encuesta realizada entre los maridos, todos polígamos: preferían la mujer no sometida a la excisión porque es activa. Por otra parte son frecuentísimas las infecciones, retenciones de orina y reglas (sobre todo cuando hay coágulo), lesiones de útero, quistes sobre las cicatrices, la vulva y la vagina. En las regiones más atrasadas, entre un 5 y un 6% de mujeres mueren a causa de esta intervención, sobre todo a la hora del parto, pues «las venas y arterias cicatrizadas tras la excisión y la infibulación estallan con frecuencia durante el parto, dando lugar a fuertes hemorragias que causan la muerte».

Naturalmente, «el progreso» llega a todas partes y en algunos países, como Mali, se trata de «civilizar» estas mutilaciones, realizándolas en hospitales, bajo anestesia local. El Gobierno maliano parece olvidar que no por ser «higienizadas» estas prácticas son menos aberrantes y que hay «heridas» que nunca pueden cicatrizar en el cuerpo de una mujer.

Utilización anticolonial

Todo esto es indignante, incomprensible, es cierto, pero lo que es francamente espeluznante es la utilización que ciertos políticos hacen de estas «costumbres ancestrales propias de nuestra cultura», los cuales, apoyándose en la lucha contra el colonialismo, «que quiere despersonalizarnos» (lo que es evidente), incitan y estimulan la continuación de la práctica de estas iniciaciones, como un elemento de identidad y unión. Como el caso del líder Jomo Kenyata, que en su libro A la sombra del monte Kenya escribió: «Ni un solo kibuyo digno de este nombre se casará con una muchacha que no haya sido sometida a la excisión, pues esta operación es la condición sine qua non para recibir una enseñanza moral y religiosa.» Una vez más la ley del papá-líder impone el sacrificio de la mujer, escondiendo su hipocresía falocrática bajo la coartada de una causa justa.

En la «progresista» Guinea el 84% de las mujeres son sometidas a la excisión y en la «socialista» Somalia el 98% son infibuladas. Unicamente Sudán ha prohibido oficialmente estas prácticas, lo que no significa que no se realicen, lejos de ello, y equipos preparados de médicos, asistentas sociales y sociólogos recorren el país en una campaña justa y clara, destinada a extirpar de la mente de los hombres los ancestrales temores que crea la «necesidad» de estas mutilaciones, y de las mujeres, la sumisión resignada a esta práctica humillante.

En este Año Internacional del Niño negarse a hablar del problema, sin poner en obra todos los medios posibles para solucionarlo, es, empleando la palabra más suave posible, una salvaje hipocresía. Felizmente la mujer africana, como la europea, americana o australiana, se ha despertado. La resignación, sumisión y humillación pierden terreno. La mujer ha decidido encontrar su propia identidad y, según todo parece indicar, está decidida a llegar hasta el final.

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